Jorge Enrique Robledo, Bogotá, septiembre 16 de 2007
Doctor
Rodrigo Pardo
Director Semana
Bogotá
Es una desvergüenza la manera como Rafael Nieto Loaiza manipula en Semana lo que dije en entrevista en El Tiempo el 12 de septiembre pasado. Una de las preguntas fue: “¿Teme usted que esta discusión sobre la influencia de las Farc sobre el Polo pueda hacer explotar en pedazos este proyecto político?” Y respondí que “El Polo es por completo independiente de las Farc y de toda otra organización. Hay que temerle más al uribismo, que nos empuja hacia la derecha”.
Y Nieto, en un artículo dedicado a insistir en la mentira de que lo que él llama los “radicales” del Polo no hemos deslindado campos con la Farc, me cita fuera de contexto y modifica mi frase para hacer una insinuación infame cuando dice que yo dije que “hay que temerle más al uribismo (que a las Farc)”.
Pero la viveza de Nieto, al igual que la reciente andanada contra el Polo de otros tantos uribistas, comprueba mi afirmación de que el Polo sí debe temerle más a la derecha que a las FARC a la hora de “hacer explotar este proyecto político”. Porque quienes sepan qué es el Polo –y no lo oculten por astutos, como hace Nieto– sabrán de nuestras enormes diferencias con esa organización guerrillera y porque es evidente que las fuerzas reaccionarias del país están poniendo todo el peso de su poder para convertir al Polo en otra fuerza de derecha, pero manteniéndole un disfraz de izquierda.
Si el Polo que preside Carlos Gaviria renunciara a luchar por profundos cambios económicos, políticos y sociales, quitándoles el filo a sus críticas a Uribe, ¿insistiría la derecha en sus tergiversaciones?
Atentamente
Jorge Enrique Robledo
Senador
Bogotá, 16 de septiembre de 2007
