“El Polo debe ratificar las concepciones con las que nacimos”: Robledo
En medio de la agitada gira que lo ha llevado por todo el país promoviendo sus listas de candidatos a delegados al IV Congreso del Polo, el senador Jorge Enrique Robledo, el más votado de Colombia y cabeza de la lista nacional # 12, atendió esta entrevista en la que habla acerca del futuro del Polo, el Plan de desarrollo de Santos, el proceso de paz y su eventual candidatura presidencial.
¿Cuál es su evaluación del Plan de Desarrollo del gobierno de Juan Manuel Santos en trámite en el Congreso?
Simón Gaviria –director del Departamento Nacional de Planeación– dijo que el Plan de Desarrollo contiene 136 exigencias de la OCDE. Eso solo es suficiente para pensar que es un plan contrario al desarrollo nacional. Es idiota pensar que las exigencias de Estados Unidos y de las principales potencias europeas son pensadas para el progreso de Colombia. El Plan de Desarrollo de Santos II, además, se guía por los mismos criterios del de Santos I, es decir; más libre comercio, más privatizaciones, más ataques a la industria y el agro, más reemplazo del trabajo nacional por el extranjero, más minería depredadora de las transnacionales, más maltrato a la salud y la educación, más desempleo y más pobreza. Por eso el Polo lo ha rechazado enfáticamente.
¿Cómo ve el proceso de paz?
En el programa fundacional del Polo, por unanimidad, consignamos, primero, no al uso de la violencia para tramitar las diferencias entre los colombianos. Y segundo, sí a un proceso de paz negociada. Así que el Polo ha respaldado el proceso de paz desde sus inicios y los polistas, con toda decisión, hacemos votos porque termine bien, en el entendido de que si bien allí no se van a resolver todos los graves problemas de Colombia, sí es posible que desaparezcan varios miles de fusiles y que quienes los empuñan se reintegren a la vida civil, cosa que sería muy benéfica para el país, entre otras razones porque habría mejores condiciones para adelantar las luchas civiles necesarias para conquistar un país soberano y democrático.
Usted ha estado recorriendo el país promoviendo las listas que usted respalda de candidatos a delegados al IV Congreso del Polo Democrático Alternativo. En esos recorridos usted ha repetido como consigna que “El Polo no se entrega, mantengamos el rumbo”. ¿A qué se refiere?
El Polo ha sido agredido desde que nació. Nos dijeron terroristas vestidos de civil, guerrilleros, fichas de Chávez, corruptos, que nos habíamos acabado. Todo, porque no nos perdonan nuestras ideas contrarias a las de las fuerzas que han mangoneado a Colombia. Y es notorio que el establecimiento nos han sonsacando más de un dirigente. Pero la agresión de Santos puede ser la peor, porque intenta cooptar al partido como un todo, al igual que lo hace con todas las fuerzas alternativas, tanto políticas como gremiales. Entonces, creo que la principal decisión del Polo en su IV Congreso tiene que ser la de ratificar las concepciones con las que nacimos, todas por fuera de la tradición liberal y conservadora, de donde además vienen Cambio Radical, el Partido de la U, el PIN y el Centro Democrático, es decir, confirmarnos como una fuerza ni-ni, ni santista ni uribista, porque tiene con ellos diferencias insalvables en torno a lo que le conviene a Colombia. Sería una desgracia que la izquierda democrática terminara envuelta en las redes de una especie de frente nacional resucitado, de una fórmula bipartidista como la que padeció el país en los tiempos del binomio liberal-conservador, cuando volvieron obligatorio escoger entre estar con el uno o con el otro, mientras la élites de esos partidos le hacían el mandado a los gringos y pagaban muy caro, con el botín burocrático, servirle a esa dominación.
Muchos jóvenes están participando en esta campaña y lo están respaldando en todo el país. Para muchos es su primera experiencia electoral. Cuál es su mensaje para esos jóvenes y para la juventud colombiana.
Es muy notoria la presencia de los jóvenes en esta campaña, al igual que el fortalecimiento del Polo Joven. No hay sector político en el país que tenga el respaldo juvenil que tiene el Polo Democrático Alternativo. Una de las cosas que más me alegra de esta campaña es ver cómo la actividad del Polo ha logrado promover un gran entusiasmo juvenil, ha logrado sembrar nuevamente la semilla de la esperanza en Colombia, la idea de que Colombia sí tiene arreglo y que sí vale la pena luchar por cambiar este país, ideas que entusiasman a la juventud.
La noticia de que usted sería candidato presidencial en 2018 ha sonado mucho…importantes sectores lo ven cómo una esperanza, similar a la que despertó en su momento el maestro Carlos Gaviria, lo que nos lleva a muchos jóvenes a animarnos y respaldar desde ya su candidatura ¿Es cierto que va a ser candidato presidencial?
Numerosos colombianos, polistas y no polistas, me proponen que presente mi nombre para una candidatura presidencial en el 2018. Al respecto, la verdad es que no tengo ninguna decisión tomada, entre otras razones, porque es temprano para decidir al respecto. Pero también he dicho que veo con ojos positivos esa posibilidad, en la medida que fuera una candidatura de convergencia nacional, que vaya bastante más allá del Polo. Siempre he visto al Polo como una especie de núcleo de una unidad muy amplia de sectores populares, de clases medias y empresarios, con independencia de sus orígenes políticos. Una alianza así sería capaz de derrotar en el 2018 a los juanmanueles, la palabreja que me inventé para agrupar a quienes han mal gobernado a Colombia.