Martínez es abogado y consejero de Luis Carlos Sarmiento Angulo, el hombre más rico de Colombia y principal propietario del Grupo Aval, el mayor grupo financiero del país. Y Martínez se ha enriquecido por cuenta de Sarmiento, hasta el punto de que entre el 80 y el 90 por ciento de los ingresos de su bufete provienen de Sarmiento.
Néstor Humberto Martínez llegó y se fue de la Fiscalía engañando, intrigando y ocultándole al país las verdaderas intenciones de su paso por la institución. Se hizo elegir Fiscal General para tejer la telaraña de la impunidad propia y la de otros peces gordos de la corrupción de Odebrecht y el Grupo Aval. Aquí, estimado lector, encontrará la verdad total sobre la salida del Fiscal corrupto
Antes de ser Fiscal, Martínez asesoró al Consorcio de la Ruta del Sol II (Odebrecht-Grupo Aval) para que pagaran menos impuestos y les señaló el camino para que les entregaran a dedo el contrato de la vía Ocaña-Gamarra, contratos por los que pagaron 100 mil millones de pesos en sobornos. Martínez también los asesoró en el negocio en el que 120 mil millones de pesos del Banco Agrario, en vez de prestárselos a los campesinos, se los prestaron a Navelena-Odebrecht, para beneficiar al Grupo Aval. Desde 2015, antes de ser Fiscal y porque se lo informó Jorge Enrique Pizano, Martínez supo del entramado corrupto entre Odebrecht y el Grupo Aval para el negocio de la Ruta del Sol II, verdad que Martínez mantuvo oculta. Los hechos dicen que se hizo elegir Fiscal a sabiendas de que tendría que investigar la corrupción de Odebrecht-Aval, función que cumplió sin ir al fondo del caso.
Néstor Humberto Martínez se movía entre las asesorías a Sarmiento Angulo y los altos cargos en el Estado. Entre 2010 y 2014 fue abogado de Odebrecht y el Grupo Aval, entre 2014 y 2015 fue minis- tro de Santos, entre 2015 y 2016 volvió a ser abogado de Odebrecht y el Grupo Aval, y para 2016 se hizo elegir Fiscal. A su salida del cargo, ninguno de sus clientes había sido ni investigado ni condenado.