El cuestionario del senador Robledo a la Liquidadora –y al gobierno, en últimas– parte de la base de no aceptar que este sea un negocio “entre privados” –como han dicho la Liquidadora, el Superintendente de Salud y el ministro de Salud–, en el sentido de que Medimás y sus compradores pueden actuar como si se tratara de una compraventa camisas o de frutas, es decir, haciendo lo que se les antoje.
Y no pude ser así, explicó el senador del Polo Democrático, porque se trata del derecho fundamental a la salud de cuatro millones de colombianos y de hacerles ganancias a 4 billones de pesos anuales de recursos públicos, así como de las condiciones laborales de los trabajadores de la EPS y las deudas de Medimás con las clínicas privadas y los hospitales públicos, con el agravante de lo mal que resultó, como se advirtió, la venta de Saludcoop Cafesalud a Medimás y de que está bajo el control de la Superintendencia de Sociedades.
Robledo también llamó la atención acerca de que la venta de Medimás a inversionistas norteamericanos pone a la EPS bajo la protección del TLC con Estados Unidos, cambio que permite sacar de la justicia colombiana sus pleitos con el Estado, para pasárselos a los muy leoninos tribunales internacionales de arbitramento, con nefastas consecuencias para el país.
El senador Robledo además señaló que propondrá en el Senado un debate de control político sobre el conjunto del caso Medimás, sobre el que también señala que constituye un engaño decir que un asunto de tanta importancia no lo decide el propio Presidente Iván Duque, sino funcionarios de tercer y cuarto nivel dentro del gobierno nacional.
Nota: se adjunta el cuestionario a la Liquidadora, Ángela María Echeverri.
Oficina de Prensa
Senador Jorge Enrique Robledo
Bogotá, 2 de enero de 2019.
