*Intervención del senador Jorge Enrique Robledo en la Audiencia Pública “Impactos negativos del Tratado Internacional para la Privatización de los Servicios Públicos, TISA”, citada por el senador Jorge Prieto Riveros, Partido Verde, Salón Boyacá, junio 3 de 2015.
El TISA se está tramitando a las escondidas. El gasto en servicios está copando los ingresos del ciudadano. Los monopolios gringos y europeos apuntan a hacer irreversibles las privatizaciones quitándoles soberanía a los Estados.
Empiezo por darle un saludo muy especial a mi colega el senador Jorge Prieto, dirigente del Partido Verde, a quien felicito por esta iniciativa promovida en buena hora, una audiencia pública que le facilita a la ciudadanía las instalaciones del Congreso y le permite debatir temas de importancia por el Canal del Congreso. Gracias, senador Prieto por su invitación. Saludar también a Rafael Espinel y a todos ustedes, también líderes de los servicios públicos.
Este evento es de una gran importancia, estén o no aquí los medios de comunicación, porque se trata nada menos que del tema de los servicios públicos domiciliarios. En el mundo de hoy vivir sin acueductos, sin energía eléctrica, sin gas, sin telefonía, es imposible. Estamos hablando de una actividad que engloba a todos los seres humanos, a la que no se puede renunciar, porque hacerlo resultaría tremendamente doloroso. Hay otros bienes que uno puede no consumir si se ponen muy caros, pero en el mundo de hoy quedarse sin agua, sin energía eléctrica, sin gas, sin telefonía, es prácticamente imposible.
Se trata entonces de un mercado y un negocio tan grande como numerosa es la humanidad. Y como lo mencionó el senador Prieto, no hay grupo financiero importante de Estados Unidos y de Europa que no esté involucrado en él. Y el propósito es exprimirnos hasta donde puedan. Si ustedes miran las cifras de lo que ha sucedido en los últimos años en Colombia con los servicios públicos domiciliarios, verán que cada vez más el gasto en servicios pesa más en el gasto general del ciudadano. Hay muchos colombianos que están dejando de comer, de vestirse, de recrearse, de educarse, por estar pagando tarifas de servicios que vienen subiendo por encima de la inflación y superando sus ingresos.
Nos congrega aquí que los grandes grupos financieros del mundo que han caído sobre este negocio están trabajando para dar un nuevo paso en contra de los derechos ciudadanos y en beneficio de sus propios bolsillos. Los grandes poderes globales y particularmente instituciones como la Organización Mundial del Comercio, OMC, que vienen impulsando desde hace mucho una política de privatización, han hecho una serie de acuerdos contra la gente, bajo el control de Estados Unidos y las potencias europeas. Es lo que estamos padeciendo en este momento. Los TLC suscritos por Colombia con Estados Unidos y la Unión Europea dan también pasos en la misma dirección, fijando los servicios públicos no como derechos, sino como negocios de los grandes capitales.
¿Qué es lo nuevo? Me lo explicaba Rafael Espinel. Como consta en los documentos, se viene tramitando a las escondidas un nuevo acuerdo, el llamado Acuerdo de Servicios, TISA, capitaneado por Estados Unidos y por la Unión Europea, en el que participan unos 50 países, incluida Colombia, pero en Colombia es una cosa como secreta. El objetivo del TISA es empeorar las normas de la OMC. Ya lo de la OMC es malo, pero los grandes monopolios son insaciables. En la OMC ellos afrontan ciertas dificultades, porque hay países que se les oponen y hay nacionalismos y no consiguen aprobar todo lo que quieren. El TISA pretende entonces dar un paso en esa dirección, no sé precisamente si para llevarlo a la OMC. Parecido a lo que nos pasa con los TLC. La OMC le impuso a Colombia un montón de cargas, pero como no fueron suficientes, los gringos y los europeos se inventaron los TLC para ir más allá. Un TLC es como un OMC Plus, un Más OMC, un acuerdo que va más lejos. Y por supuesto, son mucho más dañinos. Para poner el caso del agro, el más conocido, todo este último desastre guarda íntima relación con los TLC, que superan las normas de la OMC. El TISA, en resumen, empeorará las cosas.
Una de sus peores propuestas apunta a hacer irreversibles las privatizaciones. Los monopolios quieren meterles como un candado, un trinquete en las ruedas, para que no puedan echarse atrás. Es uno de sus objetivos centrales y en el que vienen trabajando muy en serio. Como en muchos sitios han fracasado, por muchas razones, e incluso en la propia idea del negocio a veces no les funcionan las cosas, y como además en este momento se están venciendo en Colombia algunas privatizaciones —recordemos que los contratos arrancaron en la década de los noventa—, lo que están buscando con el TISA es poder avanzar en la idea de hacerlas irreversibles, quitándoles soberanía a los Estados para tomar decisiones en el campo de los servicios públicos.
Nuestra única esperanza es mantener soberanía en las decisiones, porque si Colombia la sigue perdiendo, entregándosela a los gringos y a los europeos, va a ser imposible corregir después todos los desastres.
Un amigo mío decía que si ellos globalizan la opresión, el mal gobierno, el maltrato al ciudadano, los demócratas del mundo debemos globalizar la resistencia, la oposición, la lucha. Es una idea muy profunda. Puede parecer compleja, pero ahí está. Si ellos globalizan la opresión, nosotros debemos globalizar la resistencia. Y entiendo que lo que aquí se está promoviendo se encuentra vinculado a movimientos globales de signo democrático que están resistiendo, en muchos países con éxito. Me complacería mucho que también en Colombia se avanzara en ese sentido. Ustedes verán en qué formas y en qué modalidades, pero es bien importante que aquí se promueva algo en serio contra el TISA y que popularicemos el debate y pongamos al país a hablar de él, que cada colombiano sepa qué es lo que se nos viene encima y que les destruyamos el secretismo con el que suelen hacer sus trapisondas.
Pero que además seamos capaces, en un momento dado, de derrotar la inclusión de Colombia en un nuevo acuerdo o en otros cambios en la OMC que sea contrarios al interés de la nación.
Nuevamente agradecerle, senador Jorge Prieto, su invitación, me complace estar aquí con ustedes. Este es un evento de gran importancia que espero que culmine con un gran éxito. Estoy seguro de que así va a ser.
